AVENTURA EN BALI - Chapter II, 22/07/14 - DIRECTO AL CORAZÓN

Desde Kuta directo hacia Ubud, el corazón de Bali...

A la mañana siguiente dejé el hostal y me fui a la calle del centro comercial a esperar a Wayan; un amigo balinés de un compañero de clase que tengo en Autralia, que también es de Bali. Este chico se dedica a hacer de conductor para turistas y es quien me llevaría hasta el pueblo de Ubud. Situado en el corazón de la isla y según la mayoría de la gente con la que hablé el destino ideal para visitar. Nada que ver con Kuta, más tranquilo y menos turistas por metro cuadrado. Lo llaman el pueblo de los artistas o pueblo bohemio.

De camino al lugar donde habíamos quedado vi un Banco con mis iniciales en la fachada y algunos puñados de motos. Todas ellas con sus repectivas medidas de seguridad... ¬¬ (sarcasmo nivel 10).




Para hacer tiempo hasta que fueran las 9, hora a la que había quedado con Wayan, me despaché un buen desayuno… waffles con fresas y un café.


Wayan llegó puntual y condujo durante una hora hasta el pueblo de Ubud. Me cobró 20AUD y yo empecé a recorrer las calles buscando algún hostal barato y bien situado. Antes de seguir con mi primer día en Ubud debo decir que la mejor forma para moverte por Bali es: taxi desde aeropuerto hasta Kuta, una vez ahí caminando o en moto con cuidado. Si quieres ir a lugares más lejanos como Ubud usas el “Shuttle bus” (6AUD hasta Ubud) y para las rutas por la isla moto o conductor (siempre regateando el precio). La moto te da libertad pero tienes que tener un poco de orientación y un buen mapa.


Tras caminar unos treinta minutos y preguntar en varios sitios si tenían habitaciones disponible y el precio por noche, decidí quedarme en unos bungalows llamados Ajuna´s Guest House Bungalows situados en pleno centro de Ubud (en el mapa estrella amarilla). De paso diré que las principales calles (Jalan en balinés es calle) de Ubud son Jalan Raya Ubud, Jl. Monkey Forest, Jl. Hanoman y Jl. Dewi Sita que conecta Hanoman con M. Forest. Es en una calle secundaria de Dewi Sita llamada Jl. Goutama donde se encuentra una crepería y un warung exquisitos, pero ya lo comentaré más adelante.



El lugar donde me alojé en Ubud es una casa enorme, con patio abierto, árboles y muchas habitaciones/pequeñas casitas dispersas por este entorno. Ahí vive una familia en una de las casitas y el resto las alquila. Sale 12AUD la noche con desayuno incluido y wifi. 




La familia es encantadora: la madre es la que hace de encargada, el hijo ayuda con la casa y la comida y la hija supongo que también algo contribuye. Yo no hablé nunca con ella porque no sabía hablar inglés y cada vez que le preguntaba algo llamaba a la madre. Ahora que lo escribo da que pensar...


Bueno, desde esta casa  puedes alquilar la moto (las alquila el cuñado de la propietaria). Cuesta 5AUD/día con seguro y casco incluido. Es una honda vario 110cc.


Yo reservé la casa y la moto por tres días. Lo de la moto fue la mejor idea. Se conduce bien por Ubud y es fenomenal para moverte. El tanque es de dos litros y llenarlo cuesta 1.5AUD. En Bali hay gasolineras (estaciones de servicio) llamadas Pertamina (es una compañía indonesia) pero no es que abunden. Lo más frecuente son puestos en la calle donde te venden gasolina en botellas de vodka. En la gasolinera te cueta $0,65/litro, en estos puestitos $0,70/litro. No hay tanta diferencia. Aunque hay gente que afirma que la que compras en la calle está diluída. Yo la usé y me fue igual de bien que cuando usé la de la gasolinera.


Luego me fui a probar la motillo y de paso a ver una de las paradas obligatorias en Ubud. El Bosque de los Monos (The Monkey Forest). Un complejo natural con más de 600 macacos de cola larga dispersos por más de 100mil metros cuadrados. El bosque es un sitio de culto del hinduismo balinés y cada aspecto tiene un significado sagrado, desde los árboles y los templos, hasta los monos. El ticket fueron $3 y el dinero, como en el caso de los templos, se usa para el mantenimiento y consevación del sitio. En la entrada una mujer vende plátanos para darle a los monos por $5 pero pa´ qué comprar plátanos si todos los turistas lo hacían. Yo prefería sacar fotos de ellos dándole los plátanos y de paso presenciar algún ataque Mono-Guiri despistado. Aquí hay que cuidar de no llevar gafas de sol en la cabeza y tener vigilado el bolso porque los monos destacan por ser expertos ladrones. Así que me aseguré de llevarlo todo atado y me fui a pasear por el bosque.


Vi monos grandes, pequeños, embarazadas, familias de monos, monos comiendo, jugando, peleando, desparasitándose, bostezando, aburridos, paseando, atacando guiris, intentando abrir cocos…



 Fotos del complejo:


 Más monos comiendo plátanos...

 Hombre! Por fin salgo en una foto.... le pedí que me la hiciera balinés que vigilaba el lugar...

 Pero mira que son monos...





Esta foto se las trae. Como si la estatua estuviera haciendo referencia al mono que tiene al lado, jeje


Y ésta se sale!



Este estaba intentando abrir el coco... y el otro tomando el sol...





Más monos... saqué cientos de fotos pero es que eran una pasada. El bosque me encantó.






Este haciendo pedazos unos bastoncillos para los oídos, a saber a quién se los robó...  y menuda estaba liando tirándolos por todo el suelo...

Y esta familia estaban siempre juntos. Las crias jugaban pero los padres los agarraban para que no se perdieran. Una pasada




Cuando estaba caminando más alejado del tumulto. Perdido por uno de los caminos del bosque vi unos escalones. Me senté un rato y se acercó un monillo. Me miró, y se sentó en mi pierna. Luego me cogió un dedo y al momento subió por mi espalda hasta sentarse en mis hombros.


Yo al rato me levanté y seguí caminando, con un mono a cuestas…. Uno de los guardianes del parque me vio a lo lejos y con la cara de sorpresa o asustado gritó un Pshhhh, como para ahuyentar al mono pero ahí estábamos los dos paseando tranquilamente, así que al pasar cerca al hombre le dije riéndome “transporte gratis” señalando al mono… El hombre se rió y relajó la expresión al ver que no corría ningún peligro. Al rato el macaco saltó a un árbol y yo seguí a lo mío. 

En los siguientes escalones donde me senté había una pareja de monos acicalándose y otro a mi izquierda echado desperezándose…







Escena del planeta de los simios.... César se revela...



Esto parecía un salón de SPA. Tres parejas de monos acicalándose bajo el mismo techo:



Tras ver el bosque me fui a comer a un restaurante que está justo al lado del río. Es un Warung llamado Murni´s Warung. El bar tiene tres plantas, la primera a pie de calle, al lado de un puente, la intermedia es un lounge para tomar cocteles y la inferior está justo encima del río. Es una pequeña casita de madera. Es ahí donde yo quería ir a comer (había visto fotos en internet la noche anterior) así que cuando la camarera me vio entrar y me propuso darme la mesa de la entrada le dije que no, que iba a la planta inferior. Menos mal que me había informado por internet porque me hubiera perdido el mejor sitio para comer del bar.


Esta es la foto del lounge que comenté y de los carteles de los baños:


Como estaba en Bali tenía una lista de platos típicos balineses que debía probar:
  • Desayunar “Banana pancakes”
  • Probar “Bebek Betutu”
  • “Sate de pollo”
  •  “Babi Guling”
  • “Nasi Campur”
  • “Nasi Goreng”
  • “Comer pescado en Jimbarán”
Así que empecé probando el Bebek Betutu. Consiste en un plato de pato guisado o asado sazonado con especias picantes y su cocción dura unas veinticuatro horas. A mí me lo acompañaron de una ensalada, arroz amarillo y el caldo del pato. Para beber una Bintang grande. Me costó 15AUD.


Debo reconocer que estaba bueno aunque yo no es que sea muy amante de los patos. A no ser que estén vivos o sean amarillos, de plástico y floten en mi bañera.

Luego me fui a pasear con la moto y sacar más fotos. Alrededor de Ubud, se pueden ver las terrazas de arroz. Los arrozales son típicos y frecuentes en Bali, aunque no dan para sustentar a toda la población de la isla (más de 3 millones de personas) ya que el arroz es el plato principal de la dieta indonesia. Comen arroz cada día para desayunar. Y si a estos >3mi de balineses sumamos los turistas pues tienen que importar arroz de Java (la mayor isla de Indonesia, diecisiete veces la superficie de Canarias o cuatro veces Cataluña para que te hagas una idea).


En cada rincón de Ubud encuentras un templo, una pared decorada o una talla en piedra digna de fotografiar...


Más tarde volví al centro de Ubud y visité el palacio real Pura Desa Ubud, situado en la misma calle principal (Jl. Raya Ubud). 




A continuación el Templo Pura Taman Saraswati. Junto con el palacio real está situado en el centro de Ubud, y la entrada es gratuita. El segundo tiene integrado dentro del conjunto de edificaciones que lo forma un café muy famoso llamado Café Lotus. Es muy bonito, con un estanque de Lotos. Para comer en el restaurante hay que reservar así que de paso pedí una mesa para cenar el día siguiente. El camarero que me apuntó la reserva me miró alegre y dijo “Ohhh, Raul Gonzalez”. Todavía aquí conocen al jugador del Real Madrid. Quizás pensó que era mi hermano… a saber… 



Mira! Una casa del árbol.... lástima que no se prohibía subir... :(
 

A continuación me fui a comprar un imán pa la nevera y una fanta sabor fresa “Rasa Stroberi”. Precio 4500Rupias (45ctmos de dólar).


Por cierto, los billetes en Indonesia de Rupias son así. Por curiosidad. Las monedas de 1000 y 500 son las que más se usan. 1000Rp = $0.10, 10.000Rp = 1dólar, 100.000Rp = $10, etc...



Seguí paseando y paré en un bar a cenar. Se llama Casa Luna y está en la calle principal de Ubud.



Me pedí un plato de Sate de pollo. Son pinchitos de pollo insertados en bambú y cocinados a la parrilla. Acompañados de crema de cacahuetes y arroz con ensalada.


Además te traen de entrante una selección de cuatro salsas, cada cual más picante y rebanadas de pan. Para beber me pedí el vino típico balinés. Se llama Arak o Arrack. En Bali se destila desde la savia de las flores de coco. Yo pensé que sería un vino fino…. Para fino mi cara tras sorber un trago. Era como beber alcohol etílico. Tiene 50% de alcohol. Días después me explicaron cómo se elabora.


Resulta que para fabricarlo el campesino sube al cocotero para ver si la flor está lista. Esta flor es la que si la dejaran se convertiría en el fruto del coco (como pasa con todos los árboles frutales). Cuando deciden que ha llegado el momento en el que la flor está a punto. La cortan y ponen una caña de bambú que va goteando la savia del cocotero. A este primer líquido lo llaman tuak. Se puede beber pero no es nada fuerte. Este drenaje lo dejan todo el día desde por la mañana que ponen el bambú hasta por la noche que recogen todo el tuak y entonces lo hierven (mejor usando el fuego de leña, es más fuerte y el sabor final del Arrack mejor). Encima de la olla ponen otra caña de bambú donde se va recogiendo el vapor que se condensa y pasa a gotear en el otro extremo del bambú. Ese líquido que recogen del goteo es el Arrack finalmente. Cuando más tiempo de cocción más fuerte sale.

Pero la manera de elaboración artesanal está prohibida actualmente porque el gobierno recibe más pasta de los impuestos de la venta del manufacturado. Aún así hay villas donde lo siguen haciendo.  Y suelen beberlo entre amigos como algo social. Según me dijo el amigo de mi compañero (Wayan), normalmente lo toman en vasos de chupito mezclado con Coca Cola. Un colega desde una villa llama a otro diciendo que tiene Arrack. Compran CocaCola y quedan para beberlo, fumar y hablar. Ponen la botella en el medio y van pasando el rato contando sus historias.

Fíjate si es fuerte que un amigo de Wayan derramó un poco de Arrack sin querer en una mesa mientras estaban reunidos los colegas, lo limpió con la mano y al cabo de un rato se olvidó. Cuando se encendió el cigarro se le prendió fuego la mano. No le pasó nada pero para que veas lo fuerte que es el vino ese.

Al lado de donde estaba comiendo vi unas sillas que pensé serían la mar de cómodas así que al terminar de comer me senté un rato a bajar la comida. Y sí que eran cómodas.

Al volver al hostal vacié la bolsa que llevaba con una fanta de fresa (lo más parecido que puedo conseguir en Indonesia al Clipper de fresa. Gustavo toma nota) y el material de limpieza personal que compré en un super. Pastilla de jabón!... a la antigua.


Luego bajé al patio y estuve conversando con el hijo de la familia de la pensión (se llama Wayan también, como el conductor). Lo primero que le pregunté fue por los nombres. Qué casualidad que en dos días haya conocido a dos Wayan, dos kadek… me explicó que ellos usan sólo 4 nombres diferentes. Dependiendo de si es chico o chica, cada persona recibe uno de los cuatro nombres basado en su orden de nacimiento. El primero en nacer se llamará Wayan/Putu, el segundo Kadek/Made, el tercero Nyoman/Komang y el cuarto en nacer Ketut. Así es normal conocer algún Wayan/Kadek/Ketut… en Bali.

También me dijo que si quería ir al día siguiente al mercado de Ubud fuera desde las 5am hasta las 9am y así vería sólo locales haciendo sus compras. Si iba a las 10am en adelante era otro mundo, veías turistas y los productos diferentes. Me dijo que su madre iba cada día a las 5am para comprar alimentos para la comida de la casa y preparar los desayunos de los huéspedes.

Al rato miró al cielo, se fijó en las nubes, frunció el ceño y dijo, uy! Esta noche lloverá.  Y así fue.

AVENTURA EN BALI - Chapter I, 21/07/14 - WELCOME TO BALI

BALI

Uno de los destinos con los que siempre he soñado. 


Y ahora que estoy viviendo tan cerca y tras la sugerencia de mi hermana como destino de vacaciones, no me pude resistir a pasar una semana en esta isla con encanto. Además debo reconocer que todo australiano ha ido al menos una vez porque es el destino más barato y cercano de la costa oeste, y  los precios una vez ahí son ridículos. 

La mayoría de las cosas que vi o viví ahí me fascinaron. Fue una semana de ensueño y tras recorrerme la isla de punta a punta hablando mucho con la gente local puedo decir que me llevo una gran idea de cómo es la vida balinesa. Mi idea antes de viajar fue visitar templos, playas, ver el volcán, los murciélagos gigantes, probar la comida balinesa y como siempre sacar fotos usando mi teoría de las postales (vas a una tienda, ves postales del lugar y sabes por sus fotos cuáles son los sitios obligatorios a visitar). Pero por suerte mi aventura fue mucho más que eso y no faltaron las anécdotas…  Empecemos!


BALI Día 1 

A las nueve de la mañana salió el avión desde el aeropuerto de Perth. Me tocó la ventilla, junto a mí un asiento libre y luego una chica con la que entablé conversación cinco minutos tras despegar y nos hicimos buenos amigos. Su nombre Sophie, de UK, 26 años, llevaba viajando 9 meses. Viajó de UK a LA (dos días) luego fue a Nueva Zelanda, de ahí a Fiyi, Australia y ahora a Bali, luego Tailandia, Vietnam y de regreso a UK. Esta sí que tiene recorrido como para escribir un libro....


Al llegar al aeropuerto y tras pagar la visa para visitar el país (35US) me dirigí a un cajero para sacar dinero. 




Los cajeros están en el mismo aeropuerto, hay como cuatro o cinco pegados. Los dos primeros cajeros no me dejaron sacar dinero, me salía un mensaje de error y me pusieron los huevines como corbata. Me asusté porque sólo llevaba la tarjeta de crédito. El tercero respondió a mis plegarias y pude sacar 2,000,000Rp = 200AUD (1 dólar australiano AUD son 10,000Rp). 

Luego pregunté el precio del taxi, tienen un mostrador en el mismo aeropuerto y costaba hasta Kuta 65,000Rp = 6.5AUD). Luego pregunté a conductores (hay cientos de hombres ofreciendo coche, como palomas en la plaza) pero para mi sorpresa cobraban más, así que sin pensármelo dos veces cogí un taxi hacia Kuta. Hacia el hostal. Al llegar le di propina al chofer (5,000Rp = 50ctmos de dólar). 

Había reservado sólo la primera noche desde Australia, en la web agoda.com, en un hostal en el centro de kuta. Me costó 28AUD pero si hubiese reservado directamente me hubiese costado menos, 20AUD. El hostal sencillo, no hay papel higiénico (en Bali no se estila mucho, tienen una manguera al lado del retrete... ya te puedes imaginar lo siguiente); tampoco tenía toallas este hostal. Sólo una cama, un armario, un ventilador en el techo y electricidad, eso sí.


Tras dejar las maletas y hablar un rato con los chicos que alquilan y limpian el hostal me di una vuelta por las calles de Kuta. 

En el centro de Kuta está el monumento conmemorativo del atentado con bomba que tuvo lugar en 2002, en el que fallecieron 202 personas. Bajo el monumento una placa reza sus nombres.


A lo largo de la calle junto a la playa hay entradas a ésta cada 50metros. La primera de las entradas tiene estas dos estatuas custodiándola.


El tráfico en Kuta es una locura. Cientos de motos y coches. Taxis a punta pala y en las calles te paran cada 10 pasos con frases como: massage? Moto? Mushrooms? Viagra? Marihuana? Taxi? Driver? Tatoo? Where do you go? Where you come from? How many days in Kuta? Your first time here? (A esta pregunta el truco está en decir que no es tu primera vez así que te dejan más tranquilo. Como digas que sí te ven como un dólar con patas) How are u mate? (Esta la aprendieron de los millones de australianos que visitan la isla cada día). Puedes ir repondiendo NO a todo, o pararte y hablar con alguno de los vendedores o lo mejor, IGNORARLOS. Porque aunque digas NO, el hecho de responderles ya hace que pasen a la siguiente pregunta y es un agobio…


Por todos lados ves pequeñas ofrendas que la gente pone en la acera, delante de la tienda que tienen, o de su casa. Dentro de los coches y en algunas motos. Para que les de suerte ese día.


Kuta es sencillo de conocer. Una vez que has visto el mapa, o lo has dibujado como en mi caso porque no tengo impresora, y te has perdido dos veces, le pillas el tranquillo. 

Las principales calles de Kuta son Jalan Kartika Plaza, Jalan Pantai, Jalan Legian, Poppies lane I y Poppies lane II. Todas cerca y algunas entrecruzadas. Dos grandes centros comerciales, Discovery Shopping Mall, y Beachwalk Kuta. Tiendas por doquier y alquiler de motos. En el mapa la estrella señala el hostal...



Yo me había mirado algunos sitios desde internet para comer y visitar. Una de las mejores opciones para encontrar lugares magníficos para comer o visitar es escribir en google lo que quieres, donde lo quieres y tripadvisor. Y encuentras muy buenos lugares donde dirigirte. Yo lo hice con cada sitio donde fui a comer.

Tras caminar por las calles, por la playa y sacar algunas fotos me dirigí a comer al restaurante Bubba Gump Shrimp.


Es un restaurante basado en la temática de la película Forrest Gump. Tiene dos tv que retransmiten todo el tiempo la película mencionada. Carteles con reseñas a la película y una manera curiosa de pedir la comida. Hay dos placas en cada mesa, una azul y detrás una roja. Cuando quieres pedir algo volteas la placa azul y cuando ven la roja la camarera viene a atenderte gritando “Run, Forrest Run”.


Todo el personal del bar es super amigable, incluso la camarera me dijo al entrar, si vas a pedir Bintang (cerveza típica en Indonesia, Bintang significa “estrella”) no la compres aquí porque sale unos 8AUD la grande (660ml), vete al super de al lado y ahí la compras por 2.5AUD y te la traes. Y eso hice.

 
Además cuando es el cumpleaños de alguien traen un pastel cantando y bailando. Según me dijo luego la camarera, hay clientes que no les gusta. Pero esta gente es super happy. Les gusta más una fiesta que comer.

Me pedí unas brochetas de gambas con verduras. Exquisitas. Luego el postre incluído. Un helado con sirope y buñuelo de crema. 


La camarera vino y me preguntó: Señor, usted viaja solo? Cuando le dije que sí me empezó a preguntar cómo es eso de viajar solo. Al rato volvió y me dijo: Señor, tiene usted novia? A los cinco minutos me dijo que otra camarera quería aprender español. Me pidió el facebook. Al rato vino otra y estuvimos hablando de viajes, Australia y no sé qué más…. Total, que se derritió el helado del postre y estuve como 2 horas ahí. Tras pagar la cuenta (13,5AUD) me despedí de todos y me fui a caminar de nuevo. 

Saqué unas fotos en la playa de Kuta Beach. Estaba a reventar de turistas con tablas de surf alquiladas. Cuestan menos de 10AUD/hora. 

Compré la tarjeta SIM en el centro comercial, 15AUD. Es una sablada porque en los mercados de las afueras (yo todavía no sabía esto) cuesta 50veces menos…

Con la nueva tarjeta en el teléfono le mandé un mensaje a Sophie y quedamos para cenar en Kuta esa noche.

Fuimos a un Warung recomendado desde Tripadvisor, llamado Made´s Warung.  



Los Warung son bares sociales donde compartes la mesa con otras personas y son bastantes baratos. La comida suele ser muy rica. Y este por lo menos no me decepcionó. Con un plato por persona comes suficiente para llenarte.  Estuve hablando con una pareja de holandeses que tenía delante y me dijeron donde habían estado en Bali. También que el chico había caído enfermo durante 3 días y tuvieron que ir al hospital. Alguna contaminación alimenticia.

Aprovecho para escribir un poco sobre esto. En Bali el agua no es potable. Así que tienes que beber siempre agua embotellada. Incluso para cepillarte los dientes. 

Por suerte, los precios del agua son asequibles (botella pequeña 26ctmos/grande 0.80ctmos) no como en Australia que una botella pequeña sale 3AUD y grande 5AUD. A parte del agua debes cuidar si pides ensaladas, frutas frescas o incluso bebidas con hielo. También es una buena terapia para no morderte las uñas porque lo último que te apetece es coger una infección de esa manera tan tonta. Al mal gástrico se le conoce como “Bali Belly” y es producido a veces por los cambios alimenticios o por la bacteria fecal (E. coli). En cualquier caso hay gente que sin tener idea se va al hospital pero basta con comprar una pastilla que venden en cualquier supermercado y cuesta 23ctmos (vienen 4) llamada EntroStop. Esta es la mejor según me recomendó un balinés, y doy fe de ello. Te tomas una y a la media hora estás como nuevo. Yo lo sé por experiencia pero ya hablaré de eso más adelante…

En Made´s Warung cenamos “Gado-gado” (ensalada indonesia de verduras y huevo con salsa de cacahuetes), “Nasi Campur Special” (plato combinado de arroz, huevo, ensalada, gambas y pinchitos de pollo con crema de cacahuetes) y una sopa de pollo picante y arroz.


Tras cenar, Sophie y yo nos fuimos a dar un paseo por las calles donde vimos un grupo de balineses ensayando la música para uno de los bailes populares de la isla, el Barong Dance. Luego me compré un refresco en un super (botella mediana  de Sprite 60ctmos) y nos fuimos a pasear un rato. Luego la acompañé a coger un taxi y me fui de vuelta al hostal. 
 
De camino vi una escena que se repetiría en días sucesivos. Los balineses están enganchados a una telenovela y por toda la isla la gente la sigue. Una telenovela indonesia. Mucha gente se aposta en la calle, en frente de algún restaurante o tienda que tiene tele y de pie o sentados en el suelo siguen la telenovela. Bastante curioso.